La Unión Soviética post Stalin: Investigación paranormal


En 1960, con Khrushchev como secretario general del Partido Comunista de la Unión Soviética, el reportaje deSciende et Vie animó al Kremlin a volcarse a la investigación paranormal.

En dicho reportaje, se afirmaba que los norteamericanos habían llevado a cabo con éxito experimentos telepáticos a distancia, en un submarino de nombre Nautilus bajo el hielo del ártico. Tal información ha sido desmentida hasta el cansancio por los militares estadounidenses, pero con el clima de desconfianza y competencia que reinaba en la guerra fría, los comunistas no podían hacer otra cosa que imitar a sus contendores.

Los experimentos empezaron de inmediato. Ya en 1967 la URSS contaba con una veintena de laboratorios dedicados a la investigación psíquica con un presupuesto de unos 21 millones de dólares de entonces (136 millones de dólares actuales). Con la carrera espacial, Moscú trasladó los experimentos al espacio e intentó adiestrar a sus astronautas “no sólo en telepatía, sino también en precognición”, según un informe de julio de 1972 de la Agencia de Inteligencia de la Defensa (DIA) de EE UU. Los espías norteamericanos recordaban que Konstantín Tsiolkovsky, padre de la astronáutica soviética, había destacado la importancia de la investigación paranormal. “En la era de los vuelos espaciales, serán necesarias las habilidades telepáticas. Mientras que el cohete transportará a los hombres hacia el conocimiento de los grandes secretos del Universo, el estudio de los fenómenos psíquicos nos puede llevar hacia el conocimiento de los misterios de la mente humana. Es precisamente la solución de este secreto la que promete los mayores logros”, había dicho.

Supuestamente, en respuesta los norteamericanos también habrían iniciado su propio programa de investigación paranormal y psíquica, información que también han desmentido (cabe mencionar que esta irónica dinámica de respuesta y encubrimiento fue relatada, en tono humorístico, en la película del 2009 The men who stare at goats).

Bajo esta política, fue que se dio el famoso caso de Nina Kulagina (1926-1990) mujer rusa que decía tener habilidades telequinéticas, las cuales llamaron la atención de las autoridades rusas y ordenaron una investigación. Existen vídeos donde dicha mujer supuestamente movería objetos con la mente, en un ambiente controlado de laboratorio. Según se dice, tenía la habilidad de influir igualmente en el plano biológico, de forma que logró controlar los ritmos del corazón de una rana e, incluso, de un ser humano.
A finales de los años setenta, un paro cardíaco que casi le costó la vida, la obligó a ir progresivamente abandonando su actividad psíquica. Supuestamente, el uso intensivo de esta fue lo que le provocó su dolencia, además de otros problemas físicos y mentales que la aquejaron hasta sus últimos días.

video: http://tu.tv/videos/nina-kulagina-telekinesis-feats

Para mas info, únanse a este grupo en facebook:

Comments